Segunda salida cultural del año 2018, para ver uno de los sitios históricos que más han contribuido a la Historia de España, ya que allí nació La Reina Isabel La Católica un 22 de Abril de 1451.
La primera visita fue para ver el monasterio de Nª Sª de Gracia, regalo del emperador Carlos I a las Madres Agustinas. En su origen fue Palacio del Rey Juan II, padre de la Reina Isabel, y una vez en su interior nos muestra un gran claustro cuadrado de cuarenta metros de lado, muy sencillo y luminoso, y en el centro del mismo una gran fuente de piedra con el escudo de la Orden. Desde el patio nos trasladamos a la Sala Capitular donde se reunieron las Cortes de Castilla y León en el año 1438, que presenta un artesonado de madera mudéjar hecho a punta de cuchillo, que es una autentica maravilla con un piso de baldosa castellana. La Sala posee pinturas y dos grandes estatuas de San Agustín y Santo Tomas de Villanueva. Desde aquí nos dirigimos después para ver otros recintos llamados Sala de Espera o Antesala y Salón de Embajadores. Igual que la Sala Capitular posee un rico artesonado, que en esta ocasión se asemeja a una quilla invertida de un barco, y que al entrar las monjas en el recinto, esta sala la convirtieron en refectorio hasta el año 1984, conservándose las rusticas mesas de pino y el banco corrido de asiento, estando este decorado con lienzos de religiosas de la comunidad y como obra principal destaca un retrato de San Agustín obra del pintor Juan Carreño. En esta sala se fundó la Santa Hermandad predecesora de la Guardia Civil de nuestros días. Posee la sala dos preciosos armarios que guardan innumerables objetos religiosos, Cálices, Custodias, un bonito Crucificado de marfil, Niños Jesús vestidos, una Virgen del Pilar en alabastro, etc.
Pasamos a continuación a ver el Coro Bajo que corresponde a la Capilla Real del Palacio y que presenta un pequeño retablo barroco muy bonito y en el centro del recinto un enterramiento en alabastro al que le faltan las figuras que en su momento coronaros el mismo, decorado con medallones de santos de la orden agustina. Tiene un precioso crucificado del maestro Alonso de Vallejo y un gran órgano en uso, que es una pieza del siglo XVIII. La Capilla la vimos desde la reja del coro, siendo de una sola nave con un retablo de estilo barroco del siglo XVIII de autor desconocido. Tras salir de la Capilla, y a través de una gran escalera realizada en piedra granítica del siglo XV, y con un artesonado mudéjar de madera magnifico, llegamos a las habitaciones reales, compuestas por cuatro salas, teniendo las dos primeras una decoración con techos pompeyanos. La tercera sala posee también varios lienzos destacando uno de Ribalta que representa a Santo Tomas de Villanueva y un retrato de los Reyes Católicos, después de su enlace matrimonial. La cuarta y última sala corresponde a la habitación donde nació la Reina, una sencilla estancia de dimensiones reducidas 3,40 x 2,46 metros, donde vio la luz la más famosa Reina de España.
Tras ver esta gran obra, nos dirigimos a través de las empedradas calles de Madrigal hacia otro de los sitios dignos de ver, la Iglesia de San Nicolás de Bari, pasando antes y contemplando la fachada del Hospital Real de la Purísima Concepción, fundado en el siglo XV por Dª María de Aragón, la primera esposa del rey Juan II. La Iglesia de San Nicolás fue construida en el siglo XIII y reformada en el XV, siendo declarado Monumento Nacional en el año 1931. Destaca su esplendida torre campanario de 65 metros de altura, y consta de tres naves y dos ábsides con arcos ciegos. Además de su impresionante artesonado de madera de nogal, su pieza más destacada es la pila bautismal donde recibió las aguas cristianas la Reina Isabel. Después de visitar una bodega castellana y degustar un magnifico almuerzo, emprendimos el regreso a Alcorcón tras una breve parada en Arévalo para ver su Castillo.