Ciclo de Conferencias de la Asociación Cultural Alcorcon Siglo XXI
Premios de Novela Alcorcón Siglo XXI
II Certamen de Pintura Alcorcón Siglo XXI
III Certamen de Pintura Alcorcón Siglo XXI
I Certamen de Pintura Alcorcón Siglo XXI
Conferencia de Ely del Valle en Siglo XXI
Conferencia en Siglo XXI de D. David Pérez García
Conferencia: los excesos de comida en las fiestas navideñas

Enrique Fernández Melero

Que España vive la peor crisis económica de las últimas décadas es algo de lo que ya no duda nadie. Pero de hasta donde llega esa crisis ya no es tan seguro el que estemos con conocimiento total.  No lo sabía el PP, el cual ha tenido que revisar sus proyectos iniciales  acondicionándolos con ajustes severos. SÍ que lo sabia el PSOE, que ha procurado ocultar los datos y el alcance del daño (recuérdese que hace apenas tres años negaba la crisis, calificándola como argucias de la derecha) y retrasar las medidas imprescindibles, para que otro tomase la “patata caliente”. Entretanto rezaba (o lo que sea que hagan los marxistas) a ver si escampa.

             Pues ¿qué hubiese hecho el PSOE de ganar las últimas elecciones generales? ¿Habría tomado las medidas oportunas para evitar el desastre o hubiese seguido pedaleando hacia el abismo?

             El caso es que ahora se encuentra con que ya puede criticar las soluciones que busca el PP. No protestaron hace ocho años al encontrarse en sus manos con una economía saludable, un desarrollo empresarial fuerte, un país que funcionaba, pero sí que protestan (junto con muchos que no les votaron) de que suban los impuestos, de que se reduzca la investigación, de que se recorte la enseñanza, de tantas cosas que se nos han vuelto imprescindibles y que hay que recortar si queremos que sobrevivan.

             Es cierto que son muchos los que protestan y hay para protestar porque hemos visto gobernar a los socialistas derrochando el dinero publico y viviendo ajenos a la ruina fraguada por su mal hacer. Y eso genera resentimiento hacia los políticos y a la carencia de respeto hacia los que tienen que servir. Sus sueldos y abusos, exasperan la opinión pública y es clamor compartido de que hay que frenar tales gastos.

             Por eso podemos pedirle UN GESTO al PP, incluso quienes les hemos votado, por el respeto y la confianza que depositamos en ellos. Recuerdo una conferencia de don Jaime García Legaz, diputado del Partido Popular y actual Secretario de Estado de Comenrcio, celebrada en Alcorcón dentro del IV Ciclo de Conferencias Siglo XXI, quien interpelado sobre este tema declaró que el partido contemplaba la posibilidad de intervenir esta materia y poner coto a los abusos.

             No soy tan ingenuo para suponer que esto resulte fácil en un país con 17 gobiernos autónomos y uno central. Comunidades gobernadas durante lustros por los mismos, consideran la situación como de “derechos adquiridos” y no van a facilitar el cambio. Pero los gestos están para tiempos difíciles.

             Acabo de saber que el Banco de Alimentos de Madrid ha recogido entre los días 4 y 5 de Mayo con su Operación Kilo, la cifra de 30.000 kilos de alimentos, a pesar de la crisis y del paro. Y leo que la Iglesia en su obra social Caritas paso de atender unas 370.000 demandas de ayuda urgente de primera necesidad en 2007, a las 950.000 demandas en 2010. Por supuesto la Iglesia no precisa de gestos, pero el caso y el ejemplo es que en los peores momentos pueden superarse caminos que parecían agotados.

             Así que el gobierno podría empezar, siempre es necesario empezar por algún sitio, congelando las retribuciones de los políticos, no solo por un ejercicio, sine die, hasta que el paro baje a tres millones de desempleados.

             Y aplicando el IRPF a toda cantidad que salga del estado, sin excepciones.

             Y ya puestos a pedir, con un punto de elevación sobre lo que se retiene a los jubilados.  Congelación y tributo para todos. Sería todo UN GESTO