Miguel Rivilla San Martín
Tras la victoria de Tomás Gómez frente a Trinidad Jiménez en las primarias madrileñas, en las que ha salido derrotado el líder socialista Rodriguez Zapatero, el vencedor, lleno de euforia y con todo el énfasis de que era capaz, en los discursos pre y post electorales dijo que “se sentía orgulloso ( sic) del cambio que había obrado su partido en este país”.
En efecto, el PSOE, en los años que lleva al frente del Gobierno ha operado un cambio espectacular en España hasta el punto que “no la reconocerá …”.
Con este cambio no es para sentirse particularmente orgulloso, al dejar un país con 5 millones de parados, al haber empobrecido a los españoles, al haberles dividido y enfrentado a la ciudadanía en casi todos los aspectos de la vida: autonomías, estatuto catalán, leyes del aborto, matrimonios gays, política exterior, educación para la Alianza de Civilizaciones, pensiones bajas, subida de impuestos, abolición de signos religiosos..
Sr. Tomás Gómez, guárdese su orgullo en el bolsillo y a ver si todos los gobernantes de su partido se dedican a los problemas que realmente preocupan a todos los españoles y que ud. alardea de conocer muy bien al contacto con ellos en la calle.
Muchos creen que tener talento es una suerte; nadie que la suerte pueda ser cuestión de tener talento.
Jacinto Benavente